jueves, 31 de marzo de 2011

Terapia de risa

-¿damos una vuelta?   Un paseíto hasta el pueblo, tomamos algo en la terraza y volvemos.
-mañana hay que madrugar, ¿estás bien?
-estupendamente,   estoy tan bien que me …..   –cayó
-qué, dilo.
-una tontería, déjalo.
-dilo, nena, se valiente.
-¡qué cruz me ha caído contigo!  ¿Porqué eres tan cotilla?   ¿Todo lo tienes que saber?   
-sí, suéltalo.
 -me voy a chulear delante de mi hermana.
-¿a sí? ¿De qué?
-de ti.- dijo haciendo el gesto más chulesco que le salió.- de lo afortunada que soy, del giro que ha dado mi vida, deja de mirarme así, no te rías. ¿te acuerdas cómo nos salió delante de mi ex cuñada? Pues algo así.
-yo hago lo que tú quieras, pero las cosas no se hacen así, para empezar con aquella, las cosas salieron así, sin planear nada, apareció en el momento adecuado, para ti claro, no para ella, no compares a tu hermana con tu cuñada.
-ex cuñada, no me une nada a ella.
-por eso mismo.
-no analices todo lo que te digo, da lo mismo, me apetece darme una vuelta y punto.
-¿te puedo decir solo una cosita?
-que no, pesado. Vamos sin pensar en el porqué.
-yo no puedo evitar pensar, tu debías hacerlo también.
-tío, te estás convirtiendo en mi pepito grillo,¡ pero qué cruz!
-¿cómo quieres que vayamos, de la mano, como siempre? o te voy tocando el trasero.
-no hagas que me arrepienta de habértelo dicho, normalidad, algún achuchoncito, algún besito, pero sin pasarse, que nos conocemos y tú te embalas, y poco más, que nos vea que estamos bien, no es tan difícil.
-si luego tu hermana dice que soy soso, no me digas nada. Lo que tú quieres es que haga lo de siempre, tranquila, voy a ser el marido más cariñoso, complaciente, detallista ,que haya en la plaza, vamos lo que siempre hago, me parece un poco aburrido, si no quieres que me exceda en mis atenciones, tienes que dejarme decirte una cosa, solo una.
-suéltalo, anda, que vas a reventar.
-¿a quién quieres demostrar  que estamos bien? A tu hermana o a ti misma. Piénsalo.
-¡qué pesado eres! De verdad. No podemos dar una vuelta y punto, sin sacarle cinco o las que sean, que nunca me acuerdo, patas al gato, o es al banco, hay, no sé, da lo mismo.
-sí, sí ,vete por los cerros de Úbeda, que no nos conocemos ya ¡bruja!
Llegaron a la plaza, Mari y Josetxo estaban sentados hablando. Cuan vio a su hermana se le pasó la tontería, estaba a punto de llorar, eso no era lo que ella esperaba encontrarse. Cambió su conducta al instante, casi se sintió mal, por estar bien. Ella ya había pasado por ese trance, es muy duro deshacer una relación de tantos años, llevan toda la vida juntos, aunque él sea un idiota, no es fácil. Se saludaron, pero se sintió muy incómoda, no sabía que decir o hacerle.
-¿qué tomáis?- preguntó Manuel
-yo lo de siempre, ella un poleo.
-te ayudo – se ofreció Marian.
-cobarde –  dijo Manuel ya en el bar.
-¡no empieces! Pepito grillo.
-se te ha desmontado la chulería, ponte en su lugar, ¿tú sabes algo de esto no?
-yo estaba hecha un lio, no es lo mismo.
-compórtate como una hermana ¿porqué tienes tanto miedo a mostrar tus sentimientos hacia ella?
-¡qué dices!
-si estás preocupada, muestra preocupación, no quieras hacer un chiste.
-eso es exactamente lo que haría mi padre, intentar hacernos reír.
-pues no es el momento, no mires para otro lado, demuéstrale lo que sientes, lo que eres Marian, muéstrate como eres, no tengas tanto miedo a hacerlo. No huyas de la situación, conmigo lo haces muy bien, hazlo con ella.
Qué difícil, entre las hermanas nunca se habían mostrado los sentimientos abiertamente, con nadie de la familia, en realidad, y si me da por llorar, mira que últimamente estoy muy llorona.
-baja de la luna, vamos.
En fin, haber como soluciono esto.
-¿cómo van las cosas Mari?
-ahí andamos.
-¿cómo lo  llevan los chavales?
-uno lo entiende, pero el otro no.
-es normal, es difícil para todos.
¿Seré capaz de hacer que la conversación no parezca un interrogatorio?
-¿habéis cenado aquí?
-si, Josetxo me ha invitado.
-¿quedamos mañana? Así podremos hablar tranquilas, sin estos cotillas delante.
Manuel sonreirá mirándola. No me estoy escaqueando, pensó, mientras le devolvía la sonrisa, es una conversación privada, entre ella y yo.
-¿venias mañana a cenar no?¿ Te apuntas Josetxo?
-sí, no le había dicho nada a Marian, se me había olvidado, pero iremos. ¿josetxo?
¡qué capullo es!
-Yo me apunto
-¿me acompañas a hacer la compra mañana?
-al pueblo de al lado, mejor que aquí, ¿voy a buscarte a las once?
-de acuerdo.
-hacernos reír un rato con vuestras burradas, que estamos estresadas. Hagamos terapia de risa. Falta Fermín, para completar el trío.
-si hace falta se le llama, seguro que le hacemos un favor a Luisa.
-déjalos tranquilos, solo a sido un comentario.
Marian es de risa fácil, le encanta reír, alocadamente, su cuerpo se contorsiona ante cada carcajada, aplaude ante cada gracia, incita a más chistes, mira a Manuel que no lo quita ojo de encima,¡ pero cómo me gusta! Y esa risa contagiosa que tiene. Le duele el estómago de tanto reír, pero no puede ni quiere parar, se da cuenta que aparte de pasarse media vida en la luna, la risa también ha sido su amiga, los ataques de risa que de vez en cuando le dan, la diferencia es que ahora no se siente ridícula por reír abiertamente, todo lo contrario, Manuel provoca su risa, la incita a reír, ríe con ella, las carcajadas fluyen de su interior, como fluye el llanto, la pena, la angustia, todo sale ante una nueva carcajada, provocado por él, y él lo sabe claro, como no.
Mari, nunca ha sabido reír, fuerza la risa, no sabe hacerlo, piensa Marian, tendrá que aprender, quizá ese sea el motivo de que intentase ridiculizarla cada vez que reía abiertamente, no sabe hacerlo, no lo entiende, tendré que enseñarle. Lo haré

martes, 29 de marzo de 2011

Luna llena

Sentados en el jardín disfrutando de una preciosa noche, la luna alumbraba casi como si fuera de día. Era de esos días en que no podía dejar de mirarlo, la semi oscuridad le daba a halo de misterio, podía ver el brillo de sus ojos, sobraba hasta la luna, sus ojos, alumbraban la noche, estaba especialmente guapo. Amenizaba la noche con sus cantos acompañados de la guitarra, cantaba para ella, mirándola fijamente a los ojos. Algo bueno he tenido que hacer, para que esto me esté pasando. Era de esos extraños días en que podía percibir sus emociones, conseguía meterse dentro de él, no es que consiguiera leer sus pensamientos, iba más allá, palpaba su amor, su comprensión, el deseo de su cuerpo hacia ella. Percibía una zona oscura en su cerebro, donde nunca había conseguido entrar, pero le parecía que cada vez  esa oscuridad iba menguando, ya irá saliendo lo que tenga que salir ¿Quién soy yo para meterme donde él no quiere? ¿Quién soy yo para juzgar sobre zonas oscuras del cerebro?  Respetó esa parte inaccesible de él. Llevaba puesta esa camisa blanca que tanto le gustaba como le quedaba, se la ha puesto queriendo, no sabe este nada, sabe de sobra que hacer para conseguir sus objetivos, es muy listo, es la persona que más ha llegado a conocerme, que más se ha  preocupado por mí, así me tiene, tonta perdida, enamorada como una adolescente y lo sabe. Podría hacer conmigo lo que quisiera y lo sabe, sin embargo no se aprovecha de mi desventaja. Madre mía, pero mira que está guapo, por dentro y por fuera. Cerró los ojos, imaginó que bailaba con él, refugiada en sus brazos. Dejó de escuchar la guitarra,ahora estaba en sus brazos, pero de verdad, susurraba en su oido , lo que antes era una canción, ahora era poesia.
Gracias, Dios mio, por darme la oportunidad de conocerle, de llenarme de él. Me he pasado la vida,luchando por hacerme un hueco en la sociedad, pensando que si ganaba dinero, lo lograria, pero nunca he sido materialista, las cosas, el dinero, nunca me han gratificado, siempre me ha faltado lo más importante, sentirme querida, apoyada, tener alguien a mi lado que es capaz de darlo todo por mi y no por miedo a perderme, que es lo que pasó con mi difunto marido, no , alguien que se afrece a mi, sabiedo  lo hace, con libertad, sin miedos.Eso es lo que percibo de él, el amor en su pura esencia, sin egoismos, hace que yo me sienta egoista, cuando nunca lo he sido, he dado más de lo que he recibido siempre, pensando que si daba recibiria, pero no, donde yo buscaba cariño, he recibido egoismo. Gracias Dios mio, ahora tengo lo que siempre he buscado, aunque economicamente este bien situada, él se encarga de que no me falte de nada, pero lo que estoy viviendo a hora lo sentiria igual durmiendo debajo de un puente, con él a mi lado, es todo lo que necesito. Pero que dificil es conseguirlo, pero yo lo he conseguido.Gracias a quien sea, a él por abrazarme, por dejar que me meta dentro de él y sea capaz de ver lo que hay dentro de él, que nadie me diga que es un hijo de puta, no lo conocen, yo se lo que hay dentro de él, no entra la mentira, imposible, soy capaz de ver lo que hay en su interior, es lo mejor que he conocido. La vida te puede llevar ha hacer cosas insospechadas, nunca sabemos como vamos a reaccionar ante ciertos hechos, no está en nuestras manos juzgar a nadie, quien esté libre de pecado que tire la primera piedra, no seré yo la que lo juzgue, yo tambien tengo un pasado del que hay cosas de las que no me siento muy orgullosa.
Lo siento tengo que dajarlo aquí, lo que hoy iba a ser una entrada bonita, un acto de amor a la luz de la luna, se ha convertido en otra cosa, lo siento, otras veces cuando me pasa no suelo publicarlo, pero hoy no se poruqé me apetece. Cuando me pongo a escribir, nunca se lo que va a salir, me dejo llevar, esto es lo que hoy a salido. Habrá gente que no lo entienda, lo siento, es lo que hay. Un abrazo para todos.
MARIAN.

sábado, 26 de marzo de 2011

Mi hermana la tonta

- Voy a tomar un rato el sol al jardín.
-¿no te apetece que salgamos?
-más tarde, llevamos todo el día de aquí para allá, estoy un poco cansada.
-si no te conociera me lo creería.
-no empieces, Manuel, que aburres.
-ya que estás de mal humor, voy a practicar un rato de sillón booll. ¿Puedo?
-¿alguna vez te digo yo lo que tienes que hacer?
-si, muchas veces.
-ahora que te ha dado por no ir a trabajar ¿de qué vamos a vivir?
-ya iré mañana, estoy hasta los huevos de trabajar.
-te pasas el día trabajando, tu tampoco tienes punto medio, si trabajas tanto es porque te da la gana.
-déjalo, nena, aunque te lo explique no lo vas a entender.
-hoy me estás hartando de verdad ¿me estás tomando por tonta? O solo pretendes incordiarme. Aquí donde me ves yo también he tenido negocios, con empleadas y todo, también estoy acostumbrada a trabajar muchas más horas que tu, la diferencia es que he aprendido a vivir sin ser adicta al trabajo, puedo estar bien a gusto sin hacer nada. Aprende. ¿No te gusta como hago mi trabajo en las Ventas?
Manuel reía a carcajadas.
-¿se puede saber de qué coño te ríes?
-picona
-anda y que te den, majo, me voy a tomar el sol, si te has quedado solo para incordiarme podías irte un rato a trabajar.
-¿quieres que me vaya? Si te molesto en casa me largo.
-el que se pica ajos come, donde las dan las toman, el que da recibe, cada uno encuentra lo que busca ¿quieres que siga o me voy ya a tomar el sol?

-vete a quemarte un rato, sinvergüenza.
Manuel se sirvió una cerveza y salió detrás de ella.
-el sillón te espera.
-prefiero incordiarte.
-vete a trabajar un rato.
-los cojones, teniéndote a ti desnuda en el jardín, aquí me quedo.
-¡mirón!
-¿qué me dices de tu hermana?
-está claro, tranquila no me va a dejar. ¿Qué quieres que te diga de ella?
-¿Cuándo vas a decidirte a hablar con ella? No puedes seguir rehuyéndola toda la vida ¿qué pasará cuando tu padre falte y hayas perdido completamente la relación con tus hermanas?
-no tiene porqué pasar eso.
-pues yo creo que es lo que buscas.
-te equivocas. Llevo toda mi vida buscándome la vida yo sola. Salí de casa de mis padres con veintidós años, con una niña en brazos y casi con lo puesto, no necesito de nadie para vivir, cuando más lo necesité ¿Dónde estaban ellas? Eso sin hablar de mis padres, que ahora no viene a cuento, mi aislamiento de los últimos años no es más que el resultado de lo que la vida me ha enseñado, no puede pretender que haya una estrecha relación, no te voy a decir que no sienta nada por ella, pero nuca se ha comportado conmigo como mi hermana mayor, así que ahora tampoco, como una vez me dijo ella, el año tiene trescientos sesenta y cinco días, no cuatro, que desde luego son con los que yo me quedo con respecto a mi familia, no quiero nada más que eso, verles de vez en cuando y vale, estoy acostumbrada a relacionarme poco con ellos, es lo que hay, pero eso tampoco lo he provocado yo, ahora está el tema de mi padre, bueno pues ella, a sacado más de mi padre que yo, a mí nunca me ha dado nada, lo poco que tengo a salido de mis costillas, es la vida la que me ha llevado a vivir independiente de mi familia en todos los conceptos.
-vale, lo que no entiendo, es por qué te pones tan nerviosa cuando vas a verla. ¿Por qué la evitas después de ser tú la que la ha invitado? ¿Por qué te sientes inferior a ella?
-¿de dónde sacas tu esas conclusiones?
-de tu comportamiento. ¿Ella te llamaba tonta?
-se pasaba la vida llamándome tonta, siempre me presentaba como su hermana la tonta. ¿Sabes qué era lo malo? Que nadie me defendía de sus desprecios, yo me avergonzaba y me escondía en mi misma, me iba a la luna o a donde fuese, donde nadie me mirase, donde nadie notase mi presencia. No estoy resentida, ni mucho menos, de hecho ni me acordaba de estas cosas, no sé porque me acuerdo ahora, ya me da lo mismo. Aprendí a caminar yo sola, no me ha ido tan mal, la tonta aprendió a vivir por sus propios medios, sin depender de nadie, no dependí ni de mi marido, la vida me enseñó a que mejor sola que mal acompañada. Así que no vayamos ahora de guais, porque no, Manuel, llevo sola toda mi vida, construí tal muro a mi alrededor, que nadie fue capaz de tirarlo, hasta que entraste en mi vida, tu eres el único que ha conseguido traspasar ese muro. Tengo muchos ladrillos que desmontar todavía, pero ya he empezado a destruirlos. Acabo de descubrir otro rincón de mi cerebro, lo voy a seguir explorando hasta que consiga que vea la luz por completo. Es curioso, este es otro tema que tenia escondido, el sicólogo me preguntó muchas veces por las relaciones con mi hermana, no me acordaba de nada, pues me acabo de acordar, no es tan cariñosa como quiere aparentar, ni tan maja, como le caigas mal, lo llevas claro, esa es la diferencia entre ella y yo, que yo no me meto con nadie, nunca he ido a dañar a nadie sabiendo que hacia mal, soy mejor que ella, que quede claro. La hermana tonta, le dio trabajo a ella en más de una ocasión, la tonta se compró una villa, la tonta se ha casado con el dueño de dos hoteles ¡toma esa! Me acabo de dar cuenta de que los problemas que tuve con mi cuñada, la hermana de Oscar venían de atrás, porque esta tipa, era igual que mi hermana, se pasaba la vida haciéndome de menos, pero a esta le salió mal, de esta sí que conseguí defenderme y ponerla en su sitio ¿te acuerdas? ¡Que se joda!

jueves, 24 de marzo de 2011

MI HERMANA

-Pasamos lo que queda de mañana por ahí, igual prefieres pasarte por la oficina.
-vámonos por ahí, vamos a Donostia, un paseíto por la playa, antes de comer.
-vale comemos de pinchos, le digo a mi hermana que se baje en Donostia, la esperamos allí.
-vale, vamos al taller, tendremos que ir con tu coche, no sé si le habrán llegado ya las piezas al mío.
-¿lo del concesionario?
-otro día.
-¿ya has pensado que coche quieres?
-si, pero aunque intente explicártelo no te vas a enterar, es mejor que lo veas...
-¿me estás llamando tonta?
-Dios me libre, ¿qué buscas tu en un coche? Que funcione ¿No? Pues el mío no funciona, necesito otro.
-ya ¿y?
-si te digo la marca ¿vas a saber cuál es?
-no, pero porque no me interesa el tema, a mi con que funcionen me vale.
-eso es lo que te estoy diciendo.
-¿qué color?
-azul marino, casi negro.
-muy sucio, no me gusta.
-¿desde cuándo te preocupa la limpieza del coche?
-desde que lo has decidido sin preguntarme primero.
-perdone usted, ¿qué color le parece bien?
-azul marino, casi negro.
-cómo te gusta tocarme los huevos.
-no lo sabes tú bien. Pónmelos a huevo que veras.
-cada día estás más descarada.
-es tu culpa, yo antes no decía palabrotas, me lo estás pegando tú. Para mi padre era una ofensa que una mujer dijera palabrotas.
-a mí tampoco me gusta oírte hablar mal, pero no me refería a eso.
-eso también ha cambiado, antes no es que no lo dijera, yo creo que ni lo hubiera pensado, tú tienes la culpa.
-yo tengo la culpa de todo.
-así es, no rechistes ¡pesado!
Para cuando llegaron a la capital guipuzkoana, ya era el mediodía.
-ya no tenemos tiempo de nada, picamos algo en la estación mientras esperamos.
-¡qué pena! Un paseíto por la playa con este día tan bonito hubiera estado bien, nunca hacemos nada, somos unos sosos, tenemos que volver otro día.
-pues ya vendremos ¿a qué viene eso? A ti no hay quien te saque del pueblo, porque soy yo, y me da lo mismo, pero perdona el soso serás tú.
-déjalo, no lo entenderías.
-mira por donde le ha dado hoy, entiendo las cosas mucho mejor de lo que tú crees ¿o piensas que soy tonta?
-yo no he dicho semejante cosa. ¿Qué quieres?
-un marianito con unas aceitunas.
-¡buuuueeenooo¡ haber como acaba la cosa.
-eso a qué viene.
-a que estas muy nerviosa.
-un poco, no sé si me apetece estar toda la semana con mi hermana.
-¿Por qué le has dicho que venga? Ya te estás ahogando en un vaso de agua. Yo creo que lo que tu hermana necesita es estar tranquila, así que no creo que te moleste mucho. ¿Qué problema real existe en ver a tu hermana todos los días.
-no lo sé, no me apetece y punto.
-respuesta muy bien razonada, así me gusta ¿no será tu conciencia, que aunque ella no te dice nada a ti te parece que si? ¿Por qué no te sinceras con ella?
-ni de coña.
-si eso ya lo entiendo, estas mejor pensando que ella te culpa a ti de la situación, vamos lo de siempre cargando con una culpa que no te corresponde, si eso es lo que más te conviene.
-no empieces ,Manuel, de verdad déjalo estar, pasaré esta semana como sea.
-vale, pero sigues sintiéndote culpable y avergonzada y en tu mano esta darle la vuelta al asunto, tema zanjado de momento. No te pongas seria, regálame una de tus seductoras sonrisas.
-y dices que te has fijado en mi escote esta mañana- dijo coqueteando
-¡cómo no! –dijo besando la redondez que asomaba por la blusa.
-quieto que ya hemos dado suficiente la nota por hoy.
-aquí no nos conoce nadie.
-será a ti, te recuerdo que yo soy Donostiarra, y dos caras conocidas ya he visto, me he hecho la tonta, por cierto.
-nunca entenderé porque hacer esas cosas,¿ qué cuesta saludar?
-yo no niego el saludo a nadie, no te equivoques, lo que no me gusta es dar explicaciones.
-¿porqué piensas que tienes que dar explicaciones?
-¿te lo tengo que explicar?- dijo riendo y en un tono un poco chulesco.
-ya viene el tren, salvada por la campana.
-dame un beso y un abrazo, que ya no va a ser lo mismo.
-eso porqué.
-me cansas, de verdad, porque ya no vamos a estar solos, tengo que compartir tu atención.
-aunque estemos rodeados de mil personas tu siempre estás aquí- señalo la cabeza.
-¿tienes que analizar todo lo que digo?, de verdad me cansas.¿ No puedes darme un beso y ya está? Es fácil, Manuel, unimos nuestras bocas rozamos un poco las lenguas, al poder ser, con un poco de sentimiento……..
Manuel reía con esa risa que tanto le gusta a ella, que le llega dentro, la calla siguiendo sus instrucciones al pie de letra, metiéndose dentro de ella. Acariciando su alma, tranquilizándola.

Salvados los primeros cinco minutos dedicados a los saludos habituales, besitos y demás, que por cierto no sé de dónde ha salido esa nueva costumbre de darnos besos en la mejilla, nunca lo hacemos, ¿ahora porqué? Da lo mismo. Fue todo el camino sin abrir la boca, Mari y Manuel charlaban sin callar un momento, cómo le gusta hablar a la gente, con lo a gusto que me hubiera quedado yo en Donosti dando un paseíto de la mano por la playa ¿Qué romántico! Hasta igual nos podíamos haber mojado lo pies, sentarnos en la arena, tomar algo en la terraza de la perla, ¡qué pena!¿porqué siempre que hacemos planes de venirnos a Donosti siempre hay algo que los fastidia? La última vez que estuvimos fue el día que nos casamos, llovía a mares, por cierto, estuvimos un rato debajo de los arcos hablando, otro yuyo que me pegó aquel día,¡ qué raro!¿no? En fin algún día pasara, digo yo.

-Marian.
-mmmmmm
-¿Dónde andas?
-a sus cosas , como siempre andará vagando por la luna
-aquí.
-¿de qué estamos hablando?
-del tiempo.
-¡anda que no tienes morro!- dijo Mari- del tiempo que llevas sin ir a ver al aita.
-no hace tanto que le he visto.
-le ha debido de sabe a poco, no hace más que preguntar por ti.
-ya iré un día de estos.
De momento me voy a la luna que me gusta más, qué a gusto se tiene que vivir allí, sin gente, sin necesidad de estar todo el día hablando ¡qué paraíso! Como algún día se pueda me voy, lo malo es que si yo puedo los demás también, a Manuel si que me lo llevaría, ya no puedo prescindir de él, ya me encargaría de callarle la boca cuando me arte de escucharle. ¡Qué habilidad tengo de evadirme cuando me interesa! Y si es cierto me he pasado media vida en la luna, una que puede. Si ni fuera por ello, ya me habría vuelto loca del todo, en fin. Hoy hay luna llena, con la temperatura que hace se tiene que estar en el jardín a la noche de maravilla, igual cenamos allí, si buen plan.
-te bajas o te bajo.
-ya hemos llegado, ya me bajo.

martes, 22 de marzo de 2011

ENVIDIAS

-Me acaba de llamar mi hermana, dice que si puedo ir a buscarla a Irún. Le he dicho que vale. He quedado con ella a las dos en la estación, tenemos dos opciones, comemos pronto o no nos vemos hasta la noche.
-no me convence ninguna de las dos. Dijimos que al mediodía, siempre comeríamos juntos, no puedes saltarte las normas a la torera.
-¿te pasa algo? Si te parece mal que vaya, no voy, le digo que se coja el autobús.
-yo no he dicho eso, hay una tercera opción, vamos los dos y comemos los tres en Irún, no se te ocurra intentar deshacerte de mí, muñeca.
-¡será bobo!, no pretendía deshacerme de ti, sino más bien, no molestarte.
-¿desde cuándo me molesta estar contigo?
-déjalo, anda, quedamos a la una en las Ventas, mejor en casa.
-eso me parece mejor, a las doce y media en casa.
-¿has tenido mala mañana? Estás de mal humor.
-no estoy de mal humor, me molesta que hagas planes por tu cuenta, sin contar conmigo, con la cantidad de horas que tiene el día, y vas a quedar cuando tenemos que vernos.
-estas de mal humor, te recuerdo que lo de ir a buscarla fue idea tuya, no mía, la hora no la he puesto yo.
-vamos a dejarlo, no lo entiendes.
-pues no, la verdad, pero da lo mismo.
-¿a quién se ha pincho la rueda del coche?
-lo siento, se me olvidó llevarla.
-para una puta vez que coges mi coche, vas y pinchas, y encima me dejas la rueda sin arreglar.
-eso le puede pasar a cualquiera, no te pases. Si te has dado cuenta, será porque tú has pinchado también, ¿o no?
-pues no maja, no te hagas la ofendida ahora, todavía no he ido a trabajar.
-¿tengo yo la culpa de eso?
-no, se me ha estropeado el coche, y te digo una cosa, llego a pinchar y me encuentro la rueda sin arreglar, no sé lo que te hago.
-menos mal que me he librado, deja la rueda a arreglar si no te importa.
-ya te vale, Marian.
-venga no te enfades, ¿estás en el taller? ¿Quieres que vaya?
-mientras estoy yo aquí viendo como me arreglan el coche, podías ir a llevar la rueda.
-¿viendo? Yo diría controlando, ahora voy, gruñón.
El señor Manuel y su coche, intocable, su tesoro, miedo da cogerlo y que le pase algo, ya me puedo fugar hasta que se le pase el cabreo, también es mala suerte, nunca cojo su coche yo sola, para una vez que lo cojo, va y se pincha la rueda, en fin. Qué le vamos a hacer. Son cosas que pasan, ni que a él no le pasase, lo que seguro no le pasa es dejar la rueda olvidada, eso seguro que no, menudo es él. Soy un poco desastre para esas cosas.
Apagó el ordenador, antes de cerrarlo configuró una clave, creo que últimamente alguien me cotillea lo que tengo aquí, este ordenador es mío, la oficina también, voy a intentar averiguar quién es él o la indiscreta.

Entró en el taller, los dos hombres tenían la cabeza metida dentro del capó, no la debieron oír, pues ninguno de los dos contestó a su saludo, así que aprovechando la oportunidad blindada, escuchó lo conversación, estaban hablando de tías, como no.
-van medio desnudas, no puedes evitar mirar, cuando tengo un rato, me apoyo en la puerta a mirarlas, las crías son las peores, ¿cómo las dejaran salir así de casa?
-así andan los chavales, negros, pero tienen más peligro las mujeres  de cierta edad.
-si yo te contara, hay una clienta, que yo creo que lo hace queriendo, es amiga de mi mujer la cabrona, esa sí que me tiene negro, no veas como viene, tiene unas buenas tetas, una cien solo me falta medírselas, a esa cualquier día me la meto al baño, y se entera.
-como se te ocurra decirle algo, ya veras,  va con el cuento a María, las amiguitas son las peores, para echar un buen polvo sin complicaciones, lo mejor es irse fuera del pueblo, aquí todo se acaba sabiendo.
-tu lo tienes fácil, no te jode, si yo trabajara en un hotel, más de una caería.
-bah…. Es habla más de lo que es, no es tan fácil,  a mí, la que me tiene negro es mi mujer.
-llevas poco tiempo con ella, es normal, anda que no te ha cambiado a ti la vida.
-menudo escote que se ha puesto.
-ándate con cuidado, que ella, también trabaja en el hotel, hay mucho hijo puta suelto.
-¿a qué viene eso?
-yo no digo nada que todo se sabe. Tú controla un poco que es lo que pasa, esto es un pueblo pequeño, todos nos conocemos y hay muchas envidias.
Se acercó hasta él y le dio un cachete en el trasero.
-hola guapo, Juan, buenos días.
-Buenos días Marian.
Manuel la miraba a los ojos pero sin abrir la boca.
-¿estás muy enfadado conmigo por lo de la rueda? No es para tanto, invítame a un café.
-vamos.
-luego voy a llevar la rueda, no te enfades conmigo.
-luego la llevamos.
-¿Qué le pasa al coche?
-que hay que pensar en cambiarlo.
-mientras pienses en cambiar de coche y no a mi vamos bien.
-luego podíamos pasarnos por el concesionario. ¿Un café?
-si, por favor ¿tan enfadado estás conmigo que ni un beso?- dijo acariciando su mejilla y peinándole con sus manos.-estas muy guapo, te sientan muy bien esas canitas que te están saliendo, no te enfades conmigo…….
Agarró su cintura cortó su charla poniendo su boca encima, besándola, poseyéndola con su beso, marcando territorio, como solía hacer al principio de la relación, lo dejó hacer participando ella, no voy a permitir que se genere ninguna duda, me quiere le quiero y que todo el mundo se entere. Hoy iban a dar que hablar.
-¿hay algún hijo de puta que se está equivocando?
-que yo me haya dado cuenta, no, lo que sea se está cociendo a mis espaldas.
Recorrió su cara con los labios, besando cada centímetro de su piel, adorando su rostro, si hoy vamos a dar que hablar.
-posiblemente no sean más que habladurías, en este puto pueblo siempre ha habido muchas envidias, nos ven bien, a más de uno eso se le está atragantando.
-que les den, tiene motivos para envidiarnos, lo que tu y yo tenemos, poca gente lo tiene o lo entiende, pueden pensar que estoy contigo por tu dinero, he pasado de dar pena, a ser la mujer de Manuel, ahí es nada, si estoy segura que a más de una eso se le atraganta. Tú siempre te has encargado de que todo el mundo sepa quién soy, a quien pertenezco, sigue haciéndolo.
-ya me voy yo a encargar de saber qué es lo que se cuenta y quien es el hijo de puta que anda detrás.
-tu sabias que estaba escuchando.
-si, conozco el ruido de tu coche, tu taconeo, y tu perfume, nada de lo que tenga que ver contigo se me escapa, eres una cotilla.
-te estaba mirando el trasero.
-¿tu no estarás conmigo solo por el sexo?
-para serte sincera, en mi dilatada experiencia de sexo y lujuria, tu eres el mejor, eres guapo, estas bueno, me incitas a tener pensamientos eróticos, y me encanta hacer el amor contigo. Sin duda estoy contigo por el sexo.- dijo jugando con el bello de su tórax y besándolo.
-¡provocadora!
-¡guapo! No quiero ni pensar la que te hubiera liado si ese comentario es al revés.
-¡que Dios me pille confesado!
-todo tiene su vuelta, majo, yo no me hubiera enfadado contigo por que se te hubiera pinchado la rueda de mi coche.
-la diferencia, nena, es que ni te hubieras enterado, la hubiera cambiado, llevado a arreglar, y vuelta a poner, dejando todo como estaba, ni te hubieras enterado. Eres un desastre para esas cosas.
-bueno un poco, pero no es para tanto, tampoco hay que exagerar. Menos mal, que no te ha hecho falta la rueda.
-que Dios te pille a ti confesada, como algún día me hagas alguna faena de esas. Me oirás, por mis cojones.


domingo, 20 de marzo de 2011

¿ME DAS UN CACHO?

-Nekane va a recibir la primera lección de su padre,  lo que quiere es dinero, ni un duro,  le he ofrecido trabajo, tiene que saber que el dinero no cae del cielo, estoy dispuesto a ayudarle en lo que sea, pero dinero gratuito no le voy a dar.
-ya, me parece bien, pero seguramente ella querrá la parte de la herencia de sus abuelos.
- pues hasta eso se lo va a tener que pelear, si es lo suficientemente lista, lo pensará y se desvinculará de Gema, que es la que anda detrás de todo esto. Le he ofrecido un montón de cosas, puede organizar su vida, como ella quiera, hasta si quiere estudiar se lo pago, pero dinero por nada no.
-me parece lo correcto. ¿nos traerá problemas?
-si sigue Gema detrás de ella, si. Pero no te preocupes, lo arreglaremos.
-Estoy más arta del tema, de verdad, ya cansa.
-pasemos página ¿cogemos unos bocadillos y nos los comemos por ahí, sentados en la hierva, tu y yo, solos?.
-vale, yo con un pincho tengo suficiente, ve a pedirlos.
Qué moreno está ya ¡qué guapo! Como le sienta esa camisa blanca, estoy enamorada de él como si tuviera quince años, hay que ver lo que me gusta, fisicamente hablo, lo demás se da por hecho, es el hombre de mi vida, no hay duda, pero es que además me gusta muchisimo,verle ahí a poyado en la barra, me dan unas tentaciones de ir , abordarle por detás, meter mi mano en el bolsillo del pantalón, explorar su entrepierna, sentir como se va hinchando, sacarle la camisa del pantalón, me encanta hacer eso ¿no dicen que con la edad se va perdiendo la libido? Pues no es cierto, yo tengo más ganas de sexo que nunca, con él por supuesto,  nunca he mirado a ningún hombre como le miro a él, con deseo, meteria las manos debajo de la camisa, acariciaria su piel, hay viene, por Dios qué guapo, si supiera lo que estoy pensando, lo imagina, esa sonrrisa socarrona, a este no se le escapa nada. Hoy no se escapa, me lo voy a comer enterito.¡qué suerte tengo!
-vamos.
Sabe que lo deseo, tiene que notarlo, esa sonrrisa un poco chulita diria yo, como me gusta, esa mirada que me echa que parece que quiere llegar a mi cerebro, uffff, en cuanto me haga la más minima tonteria caigo a sus pies, le gusta hacerse el interesante.
-¿qué ronda por tu cabeza?
-nada en especial.
Ese brillo de sus ojos, me está volviendo loca.
La agarró del brazo y la sacó del camino, anduvieron un poco y se sentaron en la hierva.
-¿aquí no nos ve nadie?
-no.
Qué mirada me acaba de echar, la misma que yo le estoy echando.
-toma, un poco de lechuga para ti y agua.
-vaya lechuga más rara sabe a tortilla de patata, me gusta.
Con que ganas se está comiendo el bocadillo, si que tiene hambre.
-me gustaria ser tu bocadilo, me estoy sintiendo celosa de él.
Me encanta la cara que pone cuando el digo esas cosas.
-¿quieres que deje de comer?
-no, alimentate bien, te va ha hacer falta. ¿me das un cacho? Le haces más caso al bocadillo que a mi. Voy a tomar un poco el sol, mientras devoras el bocata. Eres sexi hasta comiendo.¿Me das un trago de tu cerveza? Tengo mucho calor.
-¿tambien estás celosa de la cerveza?
Como sigas mirandome así, lo hacemos antes de que te comas el bocata.
-puedo sentirme celosa de cualquier cosa que entre en tu boca, es mia. ¿tu no tienes calor? Desabrochate la camisa, estarás más comodo.
Me encanta la cara que pone, me lo comeria, me lo voy a comer.
-me estás volviendo loco, nena.
-eso es precisamente lo que busco, voy a tomar un poco el sol, voy a dejar al sol que recorra mi cuerpo con sus rayos, mientras tu terminas de serme infiel con el bocata.
-dile al sol que se este quietecito, tu cuerpo solo lo acaricio yo. Sientete a mi lado, te vas a quemar,desnudate primero. Voy a tener que enfadarme contigo más amenudo, me encanta como reaccionas.

sábado, 19 de marzo de 2011

ENTRE TÚ Y YO

 
 -Mi hermana dice que se viene a pasar unos días a mi casa, para desconectar.
 -  ya.
-¿ya lo sabías?
-ya te he dicho que me ha llamado, Josetxo deja la casa para ella, para que este tranquila.
-ya lo has organizado todo tu solo. No tiene porque irse.
-lo ha decidido él, además es lo correcto. No es asunto nuestro.
-ya, pero podemos cotillear.
-eso sí, especular también.
-¡cómo te gustan estas cosas!
-una apuesta.
-ya hay una apuesta, tal y como van las cosas, a lo mejor, Luisa y yo perdemos.
-está, entre tú y yo.
-¿qué nos apostamos?
-si yo gano, tienes que hacer lo que yo quiera.
-de eso nada, para que acepte, tienes que decirme qué es lo que me vas a pedir, si pierdo. Es la primera vez en todo el día que te veo sonreír .¿dónde anda tu cabeza?
-imaginado, si gano, que voy a ganar, si hace falta los meto yo en la cama.
-sin trampas. No me fio nada de ti, eres un tramposo.
-no me va hacer falta. Una partida a cartas, un poco especial, solo puedes llevar, las botas negras, esas que tienes con mucho tacón, un tanguita, sujetador negro trasparente, una blusa ceñida. Nada más. Cada vez que pierdas, tienes que ir quitándote lo que yo te diga.
-¿y si gano yo?
-pide.
-cena romántica con velitas y todo, ve pensando en el sitio. ¿En qué consiste la apuesta?
-Josetxo la va a invitar a cenar, el primer día, una cena de amigos. Luego va a ser ella, la que le va a invitar, pero en casa. Lo siguiente ya entra dentro de otra apuesta.
-¿sabes al que yo no sepa?
-no, mi experiencia en la vida.
-¡anda ya! ¡fantasma! Yo creo que a Josetxo le va a costar, seguramente la invite a cenar, seguro, no tengo duda, ella irá, hará el tonto, pero no le va a dar pie para nada de momento., esta semana no.
-vale, apuesta hecha.
-Vale. Ahora hablemos de Nekane.
-no me cortes el rollo, nena.
- sí, te estás poniendo tonto, lo que va a pasar es que yo en este momento por complacerte, voy a hacer lo que me pidas.
-¿qué problema hay?
-ninguno, solo que me siento mal por lo de esta mañana. Haría cualquier cosa por ti ¿lo sabes?
-lo sé, pero nena ¿Dónde está el problema? A mí me parece bien, lo que ha pasado esta mañana es una tontería, solo tiene la importancia que queramos darle. Mira la parte positiva, ahora yo estaría trabajando, tú en casa aburrida, sin embargo, estamos juntos, pasando un buen rato, especulando, sobre algo de lo que no tenemos ni idea, bueno yo algo sí.
-eres un tramposo.
-la apuesta está hecha, ya no te puedes echar para atrás.
-mira, guapo, porque el plan me gusta, si no la apuesta no sería válida.
-¿por qué lloras?
-porque te quiero.
-¡pues vaya!




viernes, 18 de marzo de 2011

LO SIENTO

Antes  de que saliera del bar fue corriendo tras él, le sujetó del brazo.
-por favor, vamos a hablar. Siéntate un momento conmigo, por favor.

El contacto con su piel desnuda, hizo que necesitara un abrazo urgente de él, podía sentir su nerviosismo, la energía que corría a través de ellos y su mirada sobre ella.
-termina lo que estás tomando, vámonos de aquí.
-no me apetece, vamos.
-no sé qué es lo que haces conmigo.
-pasa algo raro entre nosotros.
-me tienes embrujado, creo que lo único que pasa es que nos queremos y no podemos vivir separados.
-estamos conectados, siempre pasa cuando te enfadas conmigo, ¿te molesta?
-no, nena, estoy encantado, un poco dolido en este momento. Nunca he creído en estas cosas, pero ahora además de creer, estoy encantado de que me esté pasando a mí. Sin ti, no soy nada. Haría cualquier cosa por ti. Lo dejo todo por estar bien contigo.
-no es eso lo que quiero, ni seria sano.
-entonces dime qué puedo hacer, vivo para ti, cada cosa que hago, la hago pensando en ti, intento que tu vida sea lo más fácil posible, no confías en mí, eso me duele, no sé qué más puedo hacer. Vamos a casa.
-no, a casa no, quiero estar a solas contigo.
Evitó su mirada.
-¿ha pasado algo con Nekane?
No supo que contestar, no quería mentir, pero tampoco decir la verdad.
-vale. Vamos a dar una vuelta por el monte ¿te apetece?
-hace un día precioso para eso.
-podíamos comer, yo no he comido, te he engañado, he estado en casa esperándote.
-yo he esperado en las ventas.
-vaya par de gilipollas.
-¿estaba Nekane?
-sí, ya he tenido unas palabras con ella.
        - ¿qué ha pasado?
-eso te lo cuento luego, tu primera maja, estoy esperando a que hables.
-¿sabías que ella existía?
-sabia que Amaya tuvo otro hijo, lo sé porque cuando mató a mi hijo la busqué, ya sabemos lo que pasó, pero no sabía que era mío, ni que era una chica, me desentendí, dije si mi hijo ha vivido mal este también. No lo justifico, y menos sabiendo lo que se ahora, es lo que hay.
-Si te soy sincera me da lo mismo, no me importa lo que hayas hecho antes, el problema es mi cabeza, se inventa historias.
-ya que te inventas cosas, ¿porqué no haces que sean bonitas?
-porque eso no necesito inventármelo, ya lo tengo. Que sepas, que ella ha hablado mal de ti, pero te he defendido, no pienso consentir que nadie hable mal de ti.
-lo sé, eres capaz de sacarle los ojos a cualquier tipa, que diga algo de mí o me mire más de la cuenta, lo que no logro entender es por qué le das la vuelta al asunto y luego vas a por mí, no tiene sentido.
-ya, eso ya son los desvaríos de mi cabeza, ya te lo a vise, ahora ya no puedes hacer nada.
-si puedo, esta mañana me has pillado en un mal momento, si cuando has venido te hubiera abrazado, nos hubiéramos evitado el mal rato, lo siento no he sabido estar a la altura.
-no me digas eso que me haces sentirme muy mal.
-también te digo, que si hubieras sido tu la que me hubieras abrazado, el resultado hubiera sido el mismo.

-pues para el puto coche y abrázame.
-no hables así, no te pega. ¿Por qué no le coges el teléfono a tu hermana?
-porque es una pesada ¿te ha llamado?
-sí, preocupada, Marian no puedes hacer eso, si alguien se preocupa por ti, no puedes ignorarle. Llámala.
-luego la llamo.
-no, ahora.
-ya está el mandón, ¡qué no me mandes!
-no me queda más cojones, que hacerlo, llama
-mira quien me va a llamar a mí la atención por mal hablada, el que pone los cojones y los huevos delante de cada frase.
-llama y no desvíes la conversación, que te conozco. Tu eres muy lista pero yo más.