-te voy a hacer un regalo.
Me dice entrando en el bar abarrotado de hombres, menos mal que
no he entrado sola.
-¿me vas a invitar a un curasan?
-¡curasan! ¡Cruasán!
-¿también tengo que aprender francés?
-no, ¿te apetece pasar el día conmigo?
-vaya regalo, ya lo pensaba hacer.
-los dos solos, boba.
-¿eso es un regalo para mí o para ti?
¡Chulo! Comienza a saludar a todo el mundo, se ve que no es
la primera vez que viene, cosa que yo ya sabía claro está. Pongo cara de
domingo y beso por aquí, manos por allá, ¡como me aburren estas cosas! ¡Estas
tontas conversaciones forzadas! De que se supone que tengo que hablar, ¿de
palomas? ¿Becadas? Si yo no tengo ni idea, además me da grima tener un pobre
pájaro muerto en mi mano, no me agrada ni comérmelos, cosas mías pero es así.
Cuando escucho, ante una nueva presentación.
-ahhh, tu nueva pareja ¡qué maja!
¡Qué pasa! ¡Todos los años trae una nueva! ¡Que se me pone
la vena celosa! ¡Ojito! Él sigue la conversación como si nada, Miguel digo.
Pero mi cabeza ya está dale que te pego. Que yo sepa soy la segunda pareja
formal que ha tenido, imaginarle en esta misma situación con Blanca, su ex,
aunque sin sentido me fastidia y mucho. Estuvo veinte y cinco años casado con
ella, como es lógico vendría con ella, pero como es tan reservado…. Me ha
contado muchas cosas de ella pero de esta parte no sé nada. ¿Habrá habido
alguien más y no me lo ha contado? ¡Qué mal me ha sonado lo de tu nueva pareja!
Haber… algún rollito habrá tenido, es normal, aunque a mí me jorobe pensarlo.
-¿en qué piensas?
Dice traspasando mi cerebro con su mirada. Hace rato que me
he perdido en mis pensamientos ajena a toda conversación.
-¿Qué numero hago yo?
-la decima.
-no has parado.
-se ha hecho lo que se ha podido.
Lo dicho a chulo no le gana nadie y a orgullosa a mi tampoco, así que no le doy muestras de
mis absurdos celos. Sigue intentando adivinar mis pensamientos con su
penetrante mirada, pero no le voy a dar el gusto.
-vamos a comer a un sitio que te va a gustar ¿te apetece?
Hago un gesto afirmativo con la cabeza, sonriendo y evitando
su mirada.
Ya en el todo terreno me dice.
-suéltalo, venga, antes de explotes y de tu boca comiencen a
salir sapos y culebras.
-¿Cuántas?
-cuantas qué
-Blanca y…
-y tu.
Ahora llega el interrogatorio, no haberme dado pie, ahora te
fastidias.
-¿Cuántos ligues has tenido entre tu ex y yo?
-¿ligues? Más hubiera querido yo, alguna tontería nada más.
Solo sexo.
Para qué preguntaré si prefiero no saberlo, en fin.
-¿venias con tu ex?
-muy pocas veces, al principio porque los chavales eran
pequeños, para cuando empezaron a venir las mujeres con nosotros ya estábamos
separados.
-ya.
Pues me alegro, pero no pienso decírtelo. Me estoy
comportando como él ha hecho hace un rato, la diferencia es que yo me he dado
cuenta y le he dado su sitio, cosa que él parece que no piensa hacer eso fastidia y mucho.
-cuando aceptamos que las mujeres se unieran a nosotros, yo
ya estaba solo. Hubo alguna reticencia sobre todo por mi parte. Pasadas las primeras tensiones
al final vimos que no era mala idea.
-ya, ¿por?
Se ríe ¡capullo!
-no tenemos que limpiar, ni cocinar, solo dedicarnos a lo
que nos gusta.
¡Ya me ha dado mi lugar! No tiene este morro ni nada. Voy a
pensar que contestarle.
Hasta mañana. Agur
MARIAN
6 comentarios:
Tienes un hombre fantástico a tu lado...
Disfruta y no pienses tanto..
BESOS!!!
Es mejor no preguntar.
Todos tenemos un pasado y una relación se puede romper por el simple hecho de indagar en asuntos pasados que no nos competen.
Pero somos humanos...
Abrazos
Como dice Verónica, mejor no preguntar, así no te cabreas.
Saludos
SI, BEGO, TIENES RAZÓN, LO QUE PASA ES QUE A VECES ES TAN TORPE QUE NO SE QUE LE HARÍA.
BESOS GUAPA
ASÍ ES VERÓNICA, SOMOS HUMANOS, LA CURIOSIDAD, EL QUERER IR MÁS ALLÁ DE LO QUE REALMENTE IMPORTA NOS LLEVA A SITUACIONES... EN FIN QUE TE VOY A CONTAR.
BESOS VERO
EMILIO, ESA ES LA ETERNA LUCHA ENTRE EL CORAZÓN Y LA RAZÓN, LA CURIOSIDAD MATÓ AL GATO.
SALUDOS
me encantan vuestras diferencias de opinión
Hay que encontrar la palabra justa para la respuesta adecuada.
Suerte!
J.
Publicar un comentario