sábado, 24 de septiembre de 2011

LA MALA CONCIENCIA NO SE LAVA CON DINERO


-¡MARIA, HOSTIA ¡ REACCIONA.

-FERMÍN, NO ME GRITES, NO ESTOY SORDA.

-¿vas a consentir eso?

-no está en mi mano.

-¡con la cantidad de gente que lo está pasando mal en este momento! ¡Esa puta cría, parece tonta! ¿Has intentado hablar con ella?

-no, ni intenciones tengo, está muy mal aconsejada, pero no es mi problema. He intentado desde el principio acercarme a ella, no lo he conseguido, lo siento mucho, mientras Gema esté detrás, no hay nada que hacer.

-¡manda cojones con la puta cría!

-¡VALE! Esto lo tenía que haber resuelto Manuel, no lo hizo, ya es tarde, es una pena pero es lo que hay.

-con un poco de esfuerzo tiene la vida resuelta, a esta cría lo de trabajar parece que no le va.

-no es asunto mío, es el momento de que cada cual se lleve lo suyo, no voy a entrar en guerra con nadie. Asunto resuelto.

-para ti quizá, para nosotros no. Nos guste o no esa cría es de la familia, hay que preocuparse por ella.

-ya, Fermín, pero esa cría como tu la llamas, tiene casi treinta años, de los cuales veinte y muchos los ha vivido no se sabe cómo ¿tu ya sabias de su existencia? Nunca te lo he preguntado.

-sí.

-bueno, si ahora es familia, antes también, antes había que haberse preocupado por ella, ahora ya es tarde.

-nunca es tarde.

-no voy a revolver en el pasado, que está claro que no sé ni la mitad de lo que pasó, ni ya me interesa, me parece que los dos ahí me habéis tomado un poco el pelo, ya me da lo mismo. El pasado de Manuel murió con él, lo único que quiero es desvincularme de esas historias, que ni son mías, ni me interesan. ¿Que Nekane no ha trabajado nunca? Seguramente, ¿de dónde ha sacado el dinero? Habéis intentado lavar la mala conciencia con dinero, esta es la consecuencia, ella solo quiere su dinero. A un hijo se le cuida, se le da cariño, no se le da dinero para que no moleste. No soy quien para juzgar a nadie, ni lo pretendo. Me quedo con el Manuel que conocí, con el que conviví tres años fantásticos, los mejores de mi vida. Del otro Manuel, no quiero saber nada, con la prospectiva que te da el paso del tiempo, se que Manuel tenía dos personalidades, pero me quedo con lo que viví en primera persona con él, nada más, no quiero nada más. La pena que tengo es que de él no me queda más que dinero, renunciaría hasta del último euro por volver a verle, por ver sus ojos abiertos, escuchar su respiración, volver a verle, Fermín, escuchar su voz, su llanto, su risa, su fuerza, su alegría por la vida, sus ganas de vivir. Voy a vender la casa.

-¿cómo?

-lo que has oído, va a ser la única manera de poder seguir adelante sin él.

-piénsalo con calma, esa casa la compró pensando en ti, todo lo que hizo lo hizo por ti, para ti, para tener algo que ofrecerte. Cambió su vida, sus costumbres, todo Marian, por ti. No sé lo que le hiciste, pero te quería con locura, mucho antes de estar juntos…..

-lo siento tengo que colgar.

¡MIERDA DE VIDA, MIERDA, MIERDA, MIERDA, MIERDA……………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………





HASTA MAÑANA. AGUR.



MARIAN

2 comentarios:

Pilar Abalorios dijo...

Los excesos no son buenos, piensa las cosas despacio.

Besos

Montse dijo...

Hola Marian, nunca.

Complicado relato, con enfado último, no se consigue nada, pero a veces entiendo que es lo que hay.

Un abrazote.