Cuando apuntas con un dedo, recuerda que los otros
tres dedos te señalan a ti, -
Proverbio Ingles
tres dedos te señalan a ti, -
Proverbio Ingles
Oscar sigue observándome mientras desayuno, la verdad es que está empezando a molestarme, no sé si él o mi incapacidad de resolver el tema. Aun y todo sigo preparándole el desayuno.
En el hotel seguimos a tope. Una clienta habitual me he dicho que mi mirada melancólica está cambiando, tienes un poco más de chispa. Nos hemos reído a gusto, no le he contado los motivos, seguramente porque ni yo misma los sé, entre atrás cosas. En la charla a salido Manuel, no me ha molestada ni incomodado, me he reído. Dice que supo que se había enamorado por el cambio de sus ojos, su expresión y sus camisas. ¡Qué verdad! Fue de las primeras cosas que hice con él, cambiar todas sus camisas. ¡Lo que nos hemos reído a cuenta de mis montones de ropa! Sus camisas fueron a parar al montón de con un poco de suerte se olvida, lo conseguí.
Ya llegó mi coche nuevo, me siento rara, tengo que hacerme a él, no lo siento como mío, debo tener una fijación con los coches, es como con los hombres tengo que sentirlos míos, no me gusta cambiar, más vale lo malo conocido que lo bueno por conocer, perdón, esto no vale para Manuel, fue lo mejor que pasó por mi vida. El caso es que a los hombres intento tratarlos bien, pero a los coches los maltrato, no los cuido nada, soy una autentica dejada, me cuesta hasta limpiarlos, al final pago para que me lo hagan, la limpieza digo. En fin, lo que yo quería decir es que para probarlo como Dios manda lo he metido por esas pistas a medio asfaltar que tanto me gustan, esta es la prueba de fuego para un coche, la ha pasado. Cuando recupere a mi PITI-PITI, lo usaré solo para pasear, para lucirme con él.
Me relaja muchísimo el sonido del agua, meter los pies en el agua del rio, me he tumbado con los ojos cerrados, el sonido del agua al correr hace que entre en un estado de paz interior, solo que hoy echo de menos compañía, imagino que estoy con Miguel, que charlamos y reímos. ¡Últimamente me mira de una manera! Está revolucionando mi cuerpo y me cabeza.
De lo que yo imagino a la realidad hay una gran diferencia, si es cierto que su mirada ha cambiado, pero nada más, nuestras charlas son banales.
Esta tarde le voy a echar una mirada que se va a enterar.
Hasta mañana. Agur.
8 comentarios:
¿Que intentas tratas bien a los hombres? explica como.
No te veo echando una mirada sensual, altiva, diciéndole te voy a comer....
JAJAJAJ YA LLEGARÁ EMILIO. SOLO UN POCO MÁS DE TIEMPO.
GRACIAS POR TUS COMENTARIOS.
Tratar bien a los hombres???? uhmmmmm
Besos
Menos mal que no tratas igual a los hombres que a los coches, jejeje
No te imagino mirando a un coche con mirada lasciva...
Un abrazo
a cada uno hay que tratarlo como se merece, no? :)
un besazo!
Pues ya que has sometido al coche a la prueba de fuego, a ver si le haces lo mismo a Miguel, niña, llévatelo por esos caminos a medio asfaltar...
;)
un abrazo
Ese Miguel llegará donde se proponga, que ya esta en marcha la revolución !que peligro!
Un abrazo.
la verdad es que los hombres somos libres en nuestras decisiones, siempre que nos dejáis serlo. Asi que cambian las miradas jejejej pues claro, y el color de las mejillas y el grososr de los labios
Son señales que enviáis y hay que saber leer
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