-¡hola!
-¡hola!
-¿qué te pasa que tienes esa cara?
-estoy histérica perdida.
-¿qué pasa?
-no sé porqué me meto en estos berenjenales, siempre me arrepiento.
-no será para tanto.
-para más. ¿Me echas una mano? Mira como tengo la cocina.
-vale ¿qué hago?
-fregar.
-relájate un poco anda, que son tus hermanas, tu familia.
-si no fuera porque necesito el dinero, los invitaría a comer por ahí. ¡TEN UN POCO DE CUIDADO! NO ME SOBRAN LOS PLATOS.
-no será para tanto.
-para más.
-¿te falta mucho con la comida?
-no, ya está todo organizado. ¿Puedes pasarte por la tienda? Falta el pan, ya que vas podías traerme algo de jamón del bueno, ese que tiene Idoia guardado, dile que es para mí. Un poco de pate, también por si acaso. Tostadas, no me apetece hacerlas. ¡ANDA CON UN POCO DE CUIDADO POR FAVOR!
-¿Cuántos somos? ¿Por cierto estoy invitado?
-¡no digas bobadas! Si vienen todos somos doce.
-ahí hay comida para veinte.
-más vale que sobre que no que falte, como sigas así tendremos que comprar platos.
-huele bien.
-mejor sabrá.
-¿un vermut? Vamos a relajarnos un poco.
-primero la mesa ¿la vas poniendo mientras yo acabo?
-¿alguna manía en especial?
-no tengo manías, solo me gustan las cosas bien hechas.
¡Quien me mandará a mi meterme en estos berenjenales! Con lo a gusto que estoy sola, a mi aire. Es mi cumpleaños, lo voy a celebrar en familia, uno más. Miguel no me ha felicitado ¡qué frio! Con lo detallista que es a veces, a lo mejor es culpa mía, no lo he recibido muy bien. ¡Pobre!
-¡alcalde, guapo! ¿Ese vermut? ¿PERO CÓMO PONES ESE MANTEL? ¿NO VES QUE TIENE MANCHAS AMARILLAS?
-¿Por qué lo guardas si está sucio?
-déjalo, da lo mismo.
-ponemos cosas encima de las manchas ¿de qué te ríes loca?
-déjalo estar. Dame un besito.
-dos, uno de buenos días, el otro para felicitarte.
-debería de picar algo, el vermut me sube enseguida.
-¿aceitunas?
-vale.
-ya tienes mejor cara.
-¿sabes que eres el alcalde más guapo del mundo?
-no bebas más que estas empezando a decir chorradas.
-lo digo en serio. Dame un beso. Me estoy poniendo tonta. ¿Me quieres a pesar de ser una cascarrabias?
-claro que te quiero cascarrabias. ¿Tú me quieres a mí?
-mucho. No lo digo solo porque esté un poco piripi, es así, el alcohol solo me ayuda a decir lo que siento.
-felicidades cascarrabias.
Hasta mañana. Agur.